Siguen los ataques. Otra vez los vándalos, otra vez un Van Gogh bañado en sopa de verduras en nombre del cambio climático
Los ataques de ambientalistas a obras de arte de artistas célebres no cesan, aun cuando esta semana condenaron a dos meses de prisión a unos militantes que habían atentado contra La joven de la perla de Vermeer en Holanda. Hoy un grupo de ecologistas arrojó sopa de verduras a una pintura de Vincent Van Gogh expuesta en el Palazzo Bonaparte de Roma, sin llegar a dañarla, nuevamente como gesto de protesta ante “la pasividad de la comunidad internacional por el cambio climático”. La saga ya no sorprende. Tampoco se detiene.